Todo el mundo sabe que si vas a Tenerife no puedes perderte el Parque Nacional del Teide. Es prácticamente una visita obligada y todas las agencias y guías hablan de él. Pero no te equivoques, el Parque Nacional del Teide es mucho más que solo el volcán. Visitar el punto más alto de España, pasear por calderas volcánicas o descubrir los modos de vida tradicionales de la isla. Sea cual sea tu tipo de viaje ideal, el Parque Nacional del Teide tiene una opción que encaja a la perfección. En este artículo nos vamos a alejar de “lo típico” y vamos a descubrir todo lo que el parque tiene para ofrecer. En el artículo anterior, hablamos brevemente del Teide, pero en este artículo, entraremos en profundidad en las cosas que se pueden visitar.
Índice
El Teide
Probablemente es el sitio menos original por el que empezar, pero cuando todo el mundo recomienda algo, es por un motivo. Y es que realmente no se puede pasar por Tenerife sin ver el Parque Nacional del Teide. El volcán, así como su parque nacional, configuran el centro de la isla y es accesible desde el norte, el sur y el oeste de la isla. El Teide es conocido por todos por ser el pico más alto de España, pero la verdad es que hay muchas cosas que hacer además de visitarlo por su importancia geográfica.
Teleférico y cima
Uno de los atractivos principales de las visitas al Teide es la subida en teleférico. La subida hasta la base del teleférico, un poco por encima de los 2.300 metros de altitud, se puede hacer en coche o en autobús. Para subir al teleférico hay que comprar una entrada. Estas van desde los 13,5€ hasta por encima de los 400€ dependiendo de si solo quieres tener acceso al teleférico o si quiere hacer alguna otra ruta o actividad especial. El teleférico te sube hasta 3.555 metros y el trayecto dura unos 8 minutos.
Os estaréis diciendo “El Teide supera los 3.700 metros de altitud. ¿Qué pasa con esos últimos 200 metros?” Pues bien, mientras que sí es posible subir hasta la misma cima, para poder acceder a los últimos 163 metros se necesita un permiso especial. Este permiso hay que obtenerlo de antemano, así que si quieres subir a la cima es necesario que rellenes la solicitud con tiempo. Hay que tener en cuenta que, mientras que hace mucha ilusión poder subir hasta arriba, la caminata no es necesariamente fácil. El trayecto no resulta largo (unos 40 minutos) pero la altitud y el terreno dificultan la tarea. Pero la verdad es que, si puedes hacer el esfuerzo, merece la pena.
Poder decir que has estado en el punto más alto de España desde luego que es para presumir, pero si tienes la suerte de encontrarte con un día despejado, desde los 3.718 metros que tiene el Teide se pueden vislumbrar 4 de las islas principales del archipiélago (La Gomera, La Palma, El Hierro y Gran Canaria) así como la propia isla de Tenerife.
Parque Nacional del Teide
Tal vez pienses que por muy impresionante que sea, dedicar una mañana entera para ver solo el Teide no merece la pena, pero ¿por qué ver solo el volcán cuando hay muchas más cosas para hacer? El Parque Nacional del Teide tiene una gran variedad de actividades aptas para todos los gustos y todas las edades. Desde senderos por los que descubrir parajes mágicos, hasta una visita al observatorio donde poder aprender sobre el universo y el Sol. No permitas que lo “habitual” y lo “más recomendado” te cieguen de descubrir todos los secretos del parque.
Senderismo
Si lo que te gusta es mantenerte en contacto con la naturaleza y disfrutar de una aventura, el Teide también te lo puede ofrecer. El Parque Nacional del Teide, declarado Patrimonio Mundial de la Humanidad por la UNESCO en 2007, ofrece una gran cantidad de actividades y rutas de senderismo para hacer. No importa si eres un veterano de las caminatas o si solo quieres dar un corto paseo con tus hijos, el Teide tiene la opción ideal para ti. No importa tampoco si tu objetivo es conocer un poco de la flora y fauna del volcán o retarte a ti mismo, sea lo que sea que busques, el parque lo tiene. Y por si no me crees, te voy a enseñar unos ejemplos.
La Fortaleza
Esta ruta es probablemente una de las más fáciles de todas. Inicia en el Centro de Visitantes del Portillo y termina en la Cuesta de la Fortaleza. Esta ruta no está exactamente dentro de lo que sería el Parque Nacional, pero hace límite con él, lo que la hace perfecta para que gente que no tenga mucha experiencia pueda disfrutar de la experiencia. La dificultad de la ruta como tal es baja, en sus 5,3 km solo tiene un desnivel de 175 metros lo que la convierte en el paseo perfecto para todos aquellos que quieran andar un poco sin esforzarse demasiado. La ruta se realiza en aproximadamente 1 hora 40 y es perfecta para conocer la flora y fauna de la zona.
Teide- Pico Viejo
A pesar de que esta ruta está pensada para hacerse descendiendo, es probablemente una de las más difíciles de hacer. Mientras que la longitud del recorrido no es demasiado grande (unos 9,3 km), el terreno y la altitud a la que se encuentra la propia ruta hace que la travesía sea complicada. La caminata empieza en el Mirador de Pico Viejo, ofreciendo una vista espectacular para el inicio de la ruta. Pero las maravillosas vistas permanecen a lo largo de toda la ruta mientras se pasea por las coladas volcánicas y el inmenso cráter de Pico Viejo. La travesía termina en el Mirador de las Narices del Teide, alejándonos del pico del volcán y regalándonos una vista a este.
Telesforo Bravo
Hablábamos antes de esta ruta ya que es la que se toma para subir hasta la misma cima del Teide. Se inicia en La Rambleta, cerca de donde el teleférico termina, y solo se puede acceder a ella si se dispone de un permiso especial que es necesario obtener con anterioridad. Muchos os estaréis preguntando si merece la pena tener que hacer las gestiones para obtener el permiso. La respuesta es, indudablemente, sí. Pero antes de que nadie se lance de cabeza a ello, me parece importante recalcar la dificultad de esta ruta.
Es cierto que la ruta en si no es larga, poco más de medio kilómetro hasta la cima. Pero es una ruta que difícil. La altitud a la que se encuentra hace que el frio se mucho mayor que en el resto de la isla o incluso que en el propio parque por lo que es necesario llevarse ropa de abrigo. También hay que tener en cuenta que la altitud hace que el esfuerzo necesario sea mayor. El sendero en sí está bien acondicionado y preparado para hacerse, pero el desnivel de este es del 60%, por lo que es recomendable ir con calma y pararse cada vez que se necesite. Todo esto dicho, no quiero desanimar a nadie ni que nadie piense que puede estar perdiéndose algo espectacular, pero siempre es mejor prevenir que curar.
Centros de visitantes
Es cierto que el Teide es una visita obligada, ¿pero que pasa con aquellos que no sean de hacer senderismo y no quieran subirse al teleférico? No hay de que preocuparse, en el Parque Nacional del Teide hay actividades para todo el mundo. Como parte de la labor de preservación, el parque ha hecho hincapié en transmitir la importancia de cuidar la naturaleza. Por ello, hay numerosas actividades, excursiones y centros dedicados a informar y educar a los visitantes. Desde modos de vida tradicional hasta el estudio de la flora y la fauna autóctona, en los centros de visitantes hay muchas cosas por descubrir.
Centro Telesforo Bravo
Si bien no se encuentra dentro de lo que es el parque como tal, se haya cerca del límite, accediendo desde La Orotava. Este centro está enfocado en el conocimiento de la isla. Cuenta con un pequeño jardín de flora autóctona y una exposición con la que podemos aprender de la isla tanto a nivel geográfico como histórico. Es el sitio ideal para aprender sobre esta bella isla. Lo bueno de este centro es que, al hallarse en la propia Orotava, de la que os hablé en un artículo anterior, puedes visitarlo sin salirte de tu ruta y sin tener que trasladarse hasta el propio parque nacional.
Centro El Portillo
Este centro, a diferencia del anterior, está enfocado en el propio Parque Nacional. Este centro es ideal para conocer en profundidad el parque y cuenta con todo tipo de exposiciones, desde paneles informativos hasta la recreación de un tubo volcánico. También resulta perfecto para visitarlo con niños dado que cuenta con exposiciones interactivas, así como con numerosos videos informativos que permiten que los más pequeños aprendan sobre el parque. Cuenta también con un pequeño jardín botánico que alberga más del 75% de la flora que se puede encontrar en el Parque Nacional del Teide.
Museo Etnográfico Juan Évora
Nombrado por la última persona Las Cañadas que conservaba el modo de vida tradicional, este museo es una vista al pasado. El museo se encuentra en lo que era la vivienda del propio Juan Évora y nos enseña cómo se vivía tradicionalmente. A través de las exposiciones, aprendemos como era la vida en lo que ahora es el parque, técnicas de pastoreo tradicional y descubrimos algunos de los aspectos más relevantes del parque.
Observatorio
A todos nos gusta mirar de vez en cuando las estrellas por la noche, pero para muchos de los que vivimos en la ciudad eso no es posible. ¿Os podéis imaginar viendo las estrellas a más de 2000 metro de altitud? Pues es posible.
Muchos habréis oído hablar del Telescopio del Teide, pero la verdad es que la observación de las estrellas desde el volcán no es algo nuevo. A lo largo de los siglos, muchos astrónomos y naturalistas se aventuraron en el difícil terreno del Teide para poder estudiar el cielo. Pero fue probablemente a mediados del siglo XIX que se empezó a usar el parque de manera más oficial cuando el astrónomo Piazzi Smyth se subió a más de 3000 metros de altitud para observar las estrellas durante 3 meses.
Sin embargo, no fue hasta 1910, hace ya más de un siglo, que la construcción del observatorio se inició, dando paso a lo que hoy es uno de los observatorios más conocidos de Europa. Se encuentra en una posición privilegiada a nivel geográfico, ya que se haya entre los observatorios del este y del oeste, ha hecho que se dedique principalmente al estudio del Sol; y concentra así alguno de los mejores telescopios solares de Europa.
Pero no estoy hablando del observatorio solo por hablar, para todos aquellos interesados, el observatorio realiza visitar guiadas, tanto en grupo como individuales.
Centro de visitantes
El observatorio cuenta con un centro de visitantes creado a partir de una antigua cúpula de telescopio. Este centro se utiliza para la divulgación científica, explicando cómo funcionan los observatorios y el papel que juega la astronomía en la humanidad.
Para realizar estas visitas es necesario reservarlas con anticipación. También cabe destacar que todos los años, durante dos días, el centro cuenta con una jornada de puertas abiertas, donde se puede visitar el observatorio y aprender sobre la labor que realizan.
En este artículo hemos descubierto otras formas de visitar el Parque Nacional del Teide. Da igual tu edad, forma física o tus aficiones, en este parque hay algo que puedes hacer. ¿Por qué centrarse solo en el Teide cuándo hay tantas cosas por hacer? Con este artículo como guía, no dejes que nadie te diga lo que tienes que ver o hacer y elige la opción que más se adapte a ti. Las vacaciones son para disfrutarlas y la mejor manera de hacerlo es vivir las experiencias que mejor encajen contigo mismo. Con todo esto dicho ya solo quede salgas y vivas tu propia aventura en el Parque Nacional del Teide.
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