La ciudad de Boulogne-sur-Mer, con sus más de 40.000 habitantes, está compuesta por zonas distintas con características e historias muy diferentes: el casco antiguo, el centro de la ciudad, los barrios periféricos, la zona portuaria e industrial… Lo cierto es que no puedo desvelaros todos sus tesoros en un solo post. Pero si queréis descubrir lo que podéis ver en el casco antiguo de Boulogne, seguid leyendo este artículo: os guiaré por las calles y murallas de esta parte de la ciudad.
Índice
Un poco de historia
Primer puerto de pesca francés, primera plaza fuerte de los grandes fundadores de imperios, desde César hasta Napoleón, la historia de Boulogne-sur-Mer se remonta a la construcción de un campamento romano en el siglo I a.C.
Con una posición estratégica en el litoral noroccidental de Francia y habiendo vivido desde el inicio de los tiempos del mar y por el mar, este enclave fue de paso obligado para los conquistadores de las islas británicas. Así pues, su situación geográfica condicionó su historia, su arquitectura y su desarrollo.
En este post vamos a descubrir precisamente la zona más antigua de la ciudad, conocida como Vieille ville o Haute ville –“ciudad alta”, por su posición elevada a unos 60 metros por encima del nivel del mar.
Las murallas
Lo primero que podemos ver cuando visitamos el casco antiguo de Boulogne-sur-Mer es que se trata de un recinto amurallado con forma rectangular. Dicho diseño se corresponde con la topografía del campo militar romano original, del que también ha sobrevivido el trazado de los ejes principales y de las puertas fortificadas.
Las murallas actuales, que datan de los s. XII-XIII y que fueron construidas sobre la muralla romana, están entre las mejor conservadas de todo el Norte de Francia. Además, es posible acceder a la parte superior y disfrutar de las vistas desde el camino de ronda.
Si lo preferís, también podéis apreciarlas desde abajo, paseando por los parques y jardines que las rodean, donde encontraréis una barca solar, una estatua en honor de Mariette-Pasha (del que volveremos a hablar más adelante) así como un monumento en memoria de los caídos en las dos guerras mundiales.
En el interior de estos muros se encuentran los edificios más emblemáticos de la ciudad, como el Beffroi y la basílica de Notre Dame.
Horarios del camino de ronda:
- Del 01/04 al 30/09 de 7:30 a 22:00 h
- Del 01/10 al 31/03 de 7:30 a 20:00 h
El ayuntamiento y el Beffroi
Uno de los elementos que no podéis dejar de ver en el casco antiguo de Boulogne es el conjunto formado por el ayuntamiento y el Beffroi.
La primera torre del homenaje conocida se construye a finales del s. XII y se convierte en Beffroi en el transcurso del siglo siguiente, cuando el conde de Boulogne Philippe Hurepel la cede a la burguesía de la ciudad al finalizar la construcción del nuevo castillo condal. Aquella primera torre corresponde a la parte inferior del Beffroi actual, incluido en los edificios del ayuntamiento, que datan de los s. XVIII-XX.
Velvet / CC BY-SA 3.0
Símbolo identitario de la libertad de las diferentes ciudades en toda la región, fue declarado patrimonio mundial de la Humanidad por la UNESCO en 2005, junto con otros 22 Beffrois de la región Hauts-de-France.
Las vistas desde lo alto de sus 37 metros son impresionantes, así como los jardines efímeros situados frente a la entrada del ayuntamiento (de junio a octubre).
Horarios y tarifas:
Se puede acceder a la planta baja del Beffroi de forma gratuita en cualquier momento del año, durante los horarios de apertura del ayuntamiento.
En julio y agosto, la municipalidad ofrece visitas guiadas de los pisos superiores todos los días de la semana por 2,50€/persona (gratuito para los menores de 12 años).
Las calles empedradas
Otro de los atractivos turísticos que encontramos en el interior de este antiguo castrum romano son las calles empedradas, con multitud de comercios y restaurantes. Disfrutad de un agradable paseo mientras descubrís los productos locales o artesanales en los escaparates de las tiendas, u os dejáis transportar por los aromas de las cocinas de diferentes regiones del mundo.
Demeester / CC BY-SA 3.0
La basílica y su cripta
Es posiblemente el monumento más emblemático de toda la ciudad. Desde luego, si visitáis el casco antiguo de Boulogne no podéis dejar de ver esta joyita arquitectónica.
Durante más de 150 años, la basílica de Notre-Dame de Boulogne ha dominado la ciudad desde lo alto de los 100 metros de altura de su aguja. Su impresionante cúpula se inspira de las catedrales de San Pablo de Londres y San Pedro de Roma.
El edificio actual data del s. XIX y sucede a la catedral medieval, destruida en 1798. La basílica debe su existencia a un solo hombre, el padre Haffreingue. Este modesto sacerdote y arquitecto aficionado consagró su vida al renacimiento de un santuario dedicado a la Virgen Náutica, patrona de la ciudad desde el siglo VII. Durante la Edad Media, Boulogne fue un centro importante de peregrinaje para rendir homenaje a las reliquias que custodiaba.
La cripta
La cripta de la basílica de Notre-Dame de Boulogne es la más grande de toda Francia. Con sus más de 1.400 m2 es un auténtico dédalo de salas subterráneas.
De estilo románico, fue sepultada en el s. XIV al construirse encima un coro gótico. Fue redescubierta en 1827, durante las obras de reconstrucción. Uno de los tesoros mejor guardados son los frescos medievales que decoran algunas de las salas. Actualmente, también conserva colecciones de arte sacro (principalmente, objetos litúrgicos y relicarios) y lapidarias (capiteles, pilas bautismales, estelas funerarias…).
Como anécdota os diré que esta cripta sirvió de refugio a la población de la ciudad durante la Segunda Guerra Mundial. También es un lugar de memoria asociado al General San Martín, ya que sus restos reposaron en la cripta durante una década antes de ser repatriados a Argentina.
Horarios y tarifas:
- Basílica:
- Del 1 de abril al 31 de agosto, todos los días de 9:00 a 12:00 h y de 14:00 a 18:00 h
- Del 1 de septiembre al 31 de marzo, de 10:00 a 12:00 h y de 14:00 a 17:00 h (cerrado los domingos por la tarde y los lunes de noviembre a marzo)
- Cripta:
- Abierta todos los días de 9:30 a 12:30 h y de 14:00 a 18:00 h
- Actualmente, las visitas son libres y de 1 hora de duración : 9:30 – 11:00 – 14:00 – 15:30 – 17:00
- Tarifa: 5€ (tarifa reducida: 3€, primer domingo de mes: 2€ y gratis para los menores de 16 años)
- Reservas: +33 (0) 3 21 87 81 79 o crypte@ville-boulogne-sur-mer.fr
- Podéis amenizar la visita gracias al alquiler de una audiogía o mediante las aplicaciones disponibles para Apple y Android.
El Castillo Condal y el Museo
Cuando visitéis el casco antiguo de Boulogne, no podéis dejar de ver el castillo condal y su colección. Abierto desde 1824 a partir de un gabinete de curiosidades de un vizconde que vivía en el puerto cercano de Etaples, se trasladó al castillo en 1974.
Velvet / CC BY-SA 3.0
Desde su construcción a principios del siglo XIII, el castillo condal de Boulogne-sur-Mer ha conocido numerosas reformas y modificaciones. Sin embargo, se trata, junto con el casco antiguo, del recinto amurallado medieval mejor conservado del Norte de Francia.
La curiosa arquitectura del castillo
Desde la antigüedad, la situación de Boulogne ha representado una posición estratégica fundamental: el punto continental que permite acceder con mayor facilidad a la actual Inglaterra. Generales y emperadores romanos intentaron conquistar Britannia en dos ocasiones desde el puerto galo de Portus Itius, situado en lo que hoy es la zona portuaria de Capécure.
Sin embargo, la construcción del castillo condal actual no se termina hasta 1231; se encuentra en el ángulo oriental del antiguo recinto del castrum, el más vulnerable. Los constructores asentaron la parte oriental del edificio en el ángulo de la muralla romana del bajo imperio, que sigue siendo visible en los subterráneos del edificio. Por lo tanto, la morfología del castillo se vio condicionada por las estructuras preexistentes. Fue en esa misma época cuando se erigió por encima de la muralla romana el recinto urbano medieval, que vemos a día de hoy.
El trazado del castillo dibuja un polígono bastante regular de nueve lados y sin torre principal. Este papel lo desempeñaban parcialmente las nueve torres que flanqueaban los ángulos de la construcción, de las cuales solo cuatro siguen siendo visibles.
Si accedéis al castillo desde el casco antiguo, podréis ver que está conectado a este por un puente durmiente y un puente levadizo. El acceso está enmarcado por dos torres simétricas y protegido por un foso, desde el que podréis tomar fotos de cuento de hadas como la de la portada.
Además de la colección del museo, se puede visitar el castillo en el marco de las visitas temáticas. Si tenéis la posibilidad, vale realmente la pena. El guía os descubrirá los subterráneos del edificio, los restos de la muralla romana, el camino de ronda y la sala de la Barbière (la antigua Santa Bárbara, donde se almacenaba la pólvora), con sus maravillosos arcos ojivales.
El museo de la ciudad
La colección del museo fue trasladada al castillo en el año 1974. Cada uno de sus elementos cuenta un pasado más o menos cercano, desde el campamento romano hasta la pintura impresionista o contemporánea, pasando por curiosidades de las regiones más recónditas del planeta.
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Planta baja
Esta zona del museo está consagrada a la historia local y recuerda la riqueza patrimonial de la ciudad y de sus alrededores, desde la Bononia antigua y sus tesoros galorromanos, pasando por el estuario medieval hasta la epopeya napoleónica y al famoso campo de Boulogne.
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Primera planta
Es el piso principal del museo. Aquí encontramos la colección egipcia, con los sarcófagos y la momia que inspiraron a Mariette, gran figura local y pionero de la egiptología moderna.
Auguste Mariette, además de realizar muchos descubrimientos prestigiosos, es responsable de gran parte de las colecciones egipcias del Museo del Louvre, así como de la fundación del Museo de El Cairo en Egipto y del establecimiento de la legislación para la protección del patrimonio egipcio. A pesar de haber pasado su vida viajando de un lado a otro, no olvidó su ciudad natal y donó alrededor de 150 objetos al museo municipal.
En esta planta también podremos observar más de 450 piezas de cerámica griega, lo que constituye la segunda colección de Francia después de la del Museo del Louvre.
Si continuáis la visita de este piso, podréis realizar un viaje por el mundo desde la América precolombina y su cerámica funeraria hasta Oceanía y una de las colecciones más ricas y completas de toda Francia, pasando por África y sus estatuillas rituales. El punto culminante del departamento de etnografía es la presentación de la colección de objetos de Alaska que reúne un conjunto único de máscaras sugpiat de la isla de Kodiak.
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Tercera planta
El tercer piso está dedicado a las bellas artes. Con una colección nada desdeñable de pinturas italianas y flamencas de los siglos XV a XVII, un importante conjunto de esculturas francesas del s. XIX así como numerosas obras de artistas de la Côte d’Opale que ilustran la rica producción local del siglo XIX, con escenas principalmente costumbristas.
Finalmente, el recorrido termina con la presentación de un conjunto de pinturas donadas por el artista abstracto local, Georges Mathieu.
Visitas y tarifas
- Abierta todos los días de 9:30 a 12:30 h y de 14:00 a 18:00 h excepto los martes
- Actualmente, visitas libres de a colección (se aconseja reservar): 9:45 – 11:15 – 14:00 – 15:30
- Visitas guiadas y temáticas con reserva previa
- Tarifa: 6€ (tarifa reducida: 4€, gratis el primer domingo de mes y para los menores de 16 años). El precio incluye la combinación de visita guiada y visita libre en el mismo día
- Reservas: +33 (0) 3 21 10 02 28 o chateaumusee@ville-boulogne-sur-mer.fr
El Palacio imperial
Este edificio de estilo neoclásico es una auténtica mansión. Su fachada de dos plantas está coronada por un frontón. Se encuentra en la Place Godefroy de Bouillon, junto al ayuntamiento. Su nombre original es Hôtel Desandroui, pero recibe el nombre de Palacio Imperial en honor a uno de sus huéspedes más insignes: Napoleón I.
Se puede visitar en ocasiones especiales (jornadas históricas o del patrimonio, festividades…). Si os interesa ver su interior, lo mejor es dirigirse directamente a la oficina de turismo y preguntar.
Espero que os haya gustado este recorrido sobre lo que podéis ver en el casco antiguo de Boulogne-sur-Mer. Gracias por vuestra atención y hasta pronto para nuevas aventuras.
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