Mucha gente ha oído hablar de La Laguna e incluso la ha visitado. Su denominación de Patrimonio Cultural la convierte en una visita indispensable en el norte de Tenerife. Sin embargo, a menudo no es más que una parada rápida de camino a las Playas de Santa cruz. Pero la verdad es que hay muchas cosas que ver en La Laguna y alrededores. En este artículo vamos a adentrarnos en las maravillas de esta ciudad y en los preciosos pueblos que la rodean, así como uno de los acontecimientos más espectaculares y desconocidos. Si quieres conocer los secretos de La Laguna y como sacarle el máximo partido, sigue leyendo.
Índice
San Cristóbal de La Laguna
En el artículo pasado ya hablamos brevemente de esta maravillosa ciudad, pero esta vez vamos a adentrarnos en más profundidad en todas las cosas que se pueden hacer y ver en La Laguna y en los pueblos de alrededor.
Si bien el nombre completo de la ciudad es San Cristóbal de La Laguna, es más común referirse a ella solo cómo La Laguna. Su nombre se debe a que la ciudad está construida donde antiguamente había una laguna. La parte de San Cristóbal hace referencia a que la cuidad fue fundada cerca de la festividad al santo. En su fundación en 1496 fue denominada como villa y no fue hasta 1531 que pasó a ser considerada ciudad. La Laguna es la segunda ciudad más poblada de Tenerife y la tercera de archipiélago canario y se encuentra unida físicamente con Santa Cruz al punto de considerárselas ciudades gemelas.
Patrimonio de La Humanidad
El atractivo principal y el motivo por el que la ciudad es conocida es por su casco histórico que en 1999 fue declarado
Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Este título fue otorgado debido a que tanto el casco histórico como la propia distribución de este se ha mantenido intacto desde que se construyó por primera vez. Pasear por La Laguna es como hacer un viaje en el tiempo, recorriendo las mismas calles que los laguneros originales caminaron y viendo los mismos edificios que los colonos construyeron. Ciertamente la vista de los edificios de colores y las calles de piedra son algo impresionante de ver.
Sin embargo, no es solo la arquitectura original lo que sorprende. La Laguna se caracteriza por ser una ciudad universitaria, con cientos de estudiantes llenándola todos los cursos y dándole un carácter joven y vibrante. Lo más curioso es la forma en que este espíritu moderno se ha integrado a la perfección con lo antiguo, creando una mezcla perfecta entre lo nuevo y lo viejo. Es habitual encontrarse un guachinche junto a un bar especializado en cervezas o la catedral neoclásica frente a un local de cafés. ¿Qué hay mejor que pasar una mañana paseando por el siglo XV y después pararte a comer una hamburguesa?
Teatro Leal
No importa que las artes escénicas no sean lo tuyo, el Teatro Leal es una parada obligada entre las cosas que ver en La Laguna. Este edificio fue construido en 1915 por mandato del filántropo canario Antonio Leal y alberga numerosos murales y una fachada de estilo ecléctico.
Escondido entre las calles de La Laguna, este impresionante edifico pasa desapercibido salvo que lo estés buscando. Y realmente deberías estar buscándolo. Su fachada se alza con respecto a los edificios que lo rodean, y antes de entrar, dedícale unos minutos a contemplarla. Una mezcla de estilos y de decoraciones adornan la fachada que alberga 3 impresionantes balcones cubriéndola de lado a lado.
Una vez dentro, sentado en el patio de butacas recuerda mirar arriba y a los lados. Las numerosas pinturas y frescos que decoran las paredes y el techo merecen toda la atención de los visitantes del teatro. Es claro que este edifico fue diseñado no solo para dar casa a las obras y las óperas. El Leal es un teatro construido para ser admirado y disfrutado por su propio valor arquitectónico y artístico. En otras palabras, el Teatro Leal es una pequeña obra maestra que alberga a su vez obras maestras.
Pero si resulta que las artes escénicas son lo tuyo, el Teatro cuenta con una programación muy variada y frecuente lista para satisfacer las ansias de arte de todos. Los precios son a su vez muy variados, encontrándose entradas desde los 5€ hasta los 30€ dependiendo de la obra, lo que convierte el teatro en algo para todos los bolsillos.
El Teatro Leal acerca a la calle el arte, tanto de la arquitectura como de la escena. Así que cuando pasees por La Laguna permítete unos momentos para disfrutarlo.
Iglesia de La Concepción
Situada en la plaza del mismo nombre, esta iglesia construida en 1511 es probablemente el edificio religioso más reconocido de La Laguna. Construida por orden de Adelantado Fernández de Lugo esta iglesia es considerada como parroquia matriz de Tenerife ya que dio origen al resto de iglesias de la isla. Desde su construcción a principios del siglo XVI el edificio a sufrido diversas ampliaciones y modificaciones.
El elemento más característico y que todo aquel que visite la ciudad necesita ver, es la torre que adorna la esquina de la iglesia y recuerda al campanario de la Catedral de Turín. La torre fue construida a finales del siglo XVII y con sus 28 metros de altura ofrece una vista privilegiada. Si quieres ver La Laguna en todo su esplendor, no puedes perderte el paisaje que ofrece la torre.
La iglesia cuenta con numerosas obras de arte, retablos y altares, destacando la talla en plata situada al final de la capilla obra de los orfebres de La Laguna. De hecho, es tal el valor histórico y artístico tanto del edificio como de sus obras que en 1948 fue declarado Bien de Interés Cultural.
Bajamar y Punta del Hidalgo
Todo aquel que visita Tenerife lo hace con la idea de disfrutar del océano en algún momento. Aunque el tiempo del norte de la isla no sea el más cálido eso no significa que no te puedas dar un baño. Y el sitio perfecto para hacerlo está en Bajamar y Punta del Hidalgo. Si tienes un día libre y no sabes que más ver en La Laguna, date una vuelta por estos pueblitos.
Si bien son dos pueblos diferentes, ambos están unidos por un paseo que bordea la costa occidental de la isla. Ambos pueblos son bastante pequeños, pero que eso no te desanime de visitarlos. Las numerosas cofradías de pescadores y un bar con una impresionante barra de postres y tartas, convierte a estos pequeños pueblos en la visita ideal para tomarse un día de sol y descanso.
Piscinas Naturales
Los dos pueblos cuentan con piscinas naturales, alimentadas directamente con agua del mar. Estas piscinas son erosiones en la piedra en forma de “bañeras” que se llenan con las propias corrientes del océano. Las piscinas hacen que el baño sea prefecto para personas de todas las edades y condiciones físicas ya que evita el riesgo de ser arrastrado por corrientes. Junto a las piscinas de Bajamar hay también una pequeña playa protegida de la ferocidad de las olas por un malecón. Para los amantes de la fotografía, esta playa deja unas imágenes impresionantes cuando el mar está mas bravo y las olas rompen contra el malecón.
Paseo
Pero cuando visites estas pequeñas joyas escondidas, no te quedes solo con una de ellas. El paseo que las une puede parecer largo a primera vista, pero realmente no es demasiado esfuerzo, cuando lo recorrí por primera vez ni yo ni mis acompañantes estábamos en la mejor forma física y no tuvimos ningún problema para hacerlo. Déjate disfrutar de los poco más de 3 kilómetros que unen los dos pueblos, empapándote de las vistas del mar y del verde del norte de Tenerife.
Tejina
Tejina es un pequeño pueblo escondido entre montañas pero que alberga mucha más vida de la que cualquiera podría esperar. A pesar de su tamaño, el pueblo es el núcleo económico, empresarial y cultural de la zona. Si bien antes hablábamos de como Bajamar y Punta del Hidalgo son perfectos para pasar un día de sol, Tejina nos presenta el final perfecto al día. La oferta teatral del pueblo resulta sorprendentemente variada para la población que tiene.
Pero no es solo la abundante oferta cultural del pueblo lo que ofrece un final ideal a un día de descanso. Es precisamente en este pueblecito, escondido entre calles, que se encuentran unas de las mejores papas locas de la zona. Por si os estáis preguntando que son las “papas locas”, es un plato típico canario hecho a base de patatas fritas a las que se les añade diferentes ingredientes y salsas. Es un plato que resulta perfecto para todos los que viajáis con niños, pero no os engañéis, es un plato perfecto para los adultos también.
En mis años en la isla, era habitual juntarme con varios amigos para ir a Tejina a ver una obra de teatro y luego disfrutar unas papas locas en el bar Araucaria. Pero el teatro y las patatas no son lo más emblemático del pueblo.
Fiesta de los Corazones de Tejina
Si estas por Tenerife a finales de agosto no te olvides de pasar por Tejina. Se celebra en honor a San Bartolomé y es una de
las fiestas más llamativas y curiosas de la isla. El nombre se debe a que para la fiesta se crean unas grandes estructuras de madera en forma de cruz con dos corazones, un más pequeño encima de un más grande. Los corazones, que llegan a alcanzar los 12 metros de altura y casi una tonelada de peso, se decoran con fruta, flores y tortas de harina y son llevados hasta la plaza de la iglesia.
En la festividad participan los 3 barrios principales de Tejina, cada uno con un corazón. Una vez en la plaza, cada barrio critica el corazón de los otros.
La fiesta tiene más de 100 años de antigüedad y en 2003 fue declarada Bien de Interés Cultural. Y realmente resulta impresionante encontrarse entre la gente, disfrutando de la alegría y la fiesta y viendo los impresionantes corazones que se abren camino hasta la plaza.
Valle de Guerra
Perteneciente también al municipio de La Laguna, Valle de Guerra junto a Bajamar, Punta del Hidalgo y Tejina forman una pequeña comarca escondida entre montañas. Voy a ser honesta y decir que este pequeño pueblecito tal vez no tenga mucho a nivel de museos y monumentos, pero eso no significa que no tenga su propio encanto. Su localización entre montañas puede hacer que el acceso no sea el más fácil, pero ofrece unas vistas que quitan el aliento. Con desfiladeros de infarto este pueblo es un tesoro para los amantes de la fotografía. Sin embargo, hay otro motivo por el que estoy hablando de este pueblo perdido en estas fechas concretas.
Librea
¿Cuándo?
Se celebra en honor a la Virgen del Rosario y ocurre todos los años en el sábado más próximo a la festividad. Pero esta no es la típica celebración de pueblo. Uno de los acontecimientos principales de la fiesta es la representación de la batalla de Lepanto ocurrida en 1571. La noche del sábado, la plaza frente a la Iglesia de Nuestra Señora del Rosario pasa a convertirse en un escenario gigantesco donde durante unas horas somos transportados en el tiempo y vivemos en primera persona la batalla que hizo famoso a Cervantes.
¿Cómo?
Es posible que estéis pensando que muchos pueblos tienen actuaciones en sus fiestas, pero la representación de la Librea no es como cualquier otra. La representación se prepara desde el año anterior e involucra decenas de actores y la banda municipal. Yo tuve la suerte de poder participar un año y os puedo asegurar que el esfuerzo, la preparación y la atención al detalle de hasta la más pequeña parte hace la Librea algo impresionante de experimentar; ya seas actor o espectador.
La representación cuenta con su propia banda sonora en vivo gracias a la banda municipal situada en la propia plaza e incluso cuenta con fuegos artificiales durante la batalla, el olor a pólvora y el sonido haciendo que el espectador sienta que ha viajado en el tiempo. Es tal la importancia del evento que es emitido por la televisión canaria.
Por desgracia, debido a la situación actual, este año no se podrá hacer la representación de manera habitual, aunque si será grabada y televisada. Pero que eso no te impida visitar el pueblo, conociendo los lugares que año tras año se llenan de magia, para que cuando lo veas en la televisión, puedas experimentar, aunque de manera remota, esa sensación de estar allí, viviéndolo en primera persona.
Los pueblos de este artículo tal vez no sean los más recomendados en las guías de viaje. Pero eso no significa que no tengan mucho que ofrecer. Mis años en Tenerife me enseñaron que lo mágico de la isla a menudo está en los sitios en los que nadie mira. En este artículo te he presentado los auténticos tesoros escondidos entre las montañas de la isla; los lugares secretos que ver en La Laguna. Ahora es tu turno de decidir si quieres visitar el Tenerife de los turistas o el Tenerife de los tinerfeños.
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