¿Quieres saber qué ver en Roma sobre el Gran Imperio Romano? ¡no esperes más! Te hemos preparado un ruta por los monumentos romanos más importantes qué ver en Roma que no puedes perderte. Descubre cómo fue el esplendor del Gran Imperio Romano. Ha llegado el momento de hacer las maletas y hacer un viaje en el tiempo a una de las principales civilizaciones de toda la historia de la humanidad.

Colosseo

Para saber qué ver en Roma sobre el Gran Imperio Romano, empezamos nuestra ruta en el mismo Colosseo, también llamado anfiteatro Flavio. Es una de las 7 maravillas del mundo, y es un icono de la Roma Imperial por ser una obra arquitectónica tan bien conservada. Se trata de un anfiteatro de la época del Imperio romano, construido en el 72 a.C. Servía como lugar de espectáculo para las luchas entre gladiadores o fieras. También tenían lugar otros espectáculos como ejecuciones, obras de teatro o caza. Cuando se inauguró, el emperador Tito organizó 100 días de juegos.

Arco de Constantino

Situado junto al Colosseo, se encuentra el famoso Arco de Constantino. Es un arco del triunfo construido en el año 315 para conmemorar la victoria de Constantino en la batalla del Puente Milvi. Es uno de los arcos del triunfo más conocidos a lo largo de la Historia.

Domus Aurea

Justo detrás del Colosseo, está el llamado Parco del Colle Opio, donde encuentra la Domus Aurea. Sin duda es una visita excepcional, de la que muchos turistas se olvidan. Se trata del Palacio de Nerón, que hizo construir tras el incendio del año 64. Se estima que este palacio equivalía a una superficie similar a 25 veces el Colosseo. Solo en el Palacio había más de 300 habitaciones, que se utilizaban básicamente para fiestas.

Foros Imperiales

Unos monumentos esenciales que debemos ver en Roma sobre el Gran Imperio son por supuesto los foros. Volviendo por el Colosseo, y bajando por la gran Via dei Fori Imperiali, nos encontramos con los Foros Imperiales. Estos foros comprenden un área de excavaciones lleno de ruinas de plazas y edificios que, desde el 46 a.C. hasta el 113 d.C. fueron el centro de la ciudad de Roma. Dentro de estos Foros, te encuentras diferentes conjuntos de edificios, divididos en: el Foro de César, el Foro de Augusto, el Foro de Nerva y el cuarto foro, el de Trajano. En todos estos conjuntos de excavaciones, hay templos – como el de Venus Generatiz, el de Marte, el de la Paz. También estatuas que representaban grandes figuras de la historia de Roma – como la Dinastía Julia, Rómulo, Eneas. Sin duda, dos de los elementos más importantes y famosos de esta visita son el Mercado de Trajano y la Columna de Trajano.

Foro Romano

Al otro lado de la Via dei Foro Imperiali nos encontramos con el gran Foro Romano. Es una zona arqueológica, muy bien conservada, llena de templos, monumentos y más edificios. Dentro del Foro vas a encontrar el Arco di Severo, o el Templo de Saturno, el Templo de Vespasiano y Tito, el templo de Faustina, el templo di Vesta, basílicas religiosas, el templo di Venere y Roma, el templo de Dioscuri, toda la decoración con relieves de las columnas y arcos, la Casa delle Vestali, el famoso Arco de Tito, etc. Como ves, del Foro es imposible cansarse; está llena de testimonios vivos sobre la vida los romanos desde hace miles de siglos. Cuando cae el imperio, el Foro quedó abandonado, y hasta los edificios que lo componen quedaron enterrados. No fue hasta el siglo XIV, que el Papa Urbano V se interesó por esta parte de la ciudad.

Via Sacra

Todos estos edificios transcurren a lo largo de lo que se llama Via Sacra. Viene del latín, que significa vía sagrada. Es un paseo histórico muy importante, ya que sus inicios se remontan a la misma fundación de la ciudad de Roma. Esta vía, que cruzaba la ciudad, vivió muchos desfiles de victorias militares o fiestas religiosas.

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Palatino

Detrás de los Foros Romanos, nos encontramos dentro del Palatino; una de las siete colinas romanas sobre las que se fundó la ciudad de Roma, y punto clave que ver en Roma. El Palatino es conocido por abarcar las residencias exclusivas de los emperadores y zona residencial de familias adineradas. ¿Por qué? En la mitología romana se creía que era la zona donde Rómulo y Remo –fundadores de la ciudad – fueron amamantados por la loba. Siguen existiendo ruinas de lo que fueron los ostentosos palacios imperiales. En la época, el Palatino estaba dividido en dos áreas, donde, en la Domus Flavia, el emperador tenía contacto con los ciudadanos por cualquier motivo político, económico o social, y la Domus Augustana, que era la residencia privada de los emperadores.

Circo Massimo

Otro monumento que tienes que ver en Roma del Gran Imperio. A los pies de la colina Palatina, se encuentra el grandioso Circo Massimo. Era una construcción alargada para las carreras de carros. Tenía la pista de arena, con 600 metros de largo y 225 de ancho. Se estima que fue el mayor circo de toda la Antigua Roma. Aunque no se conserva muy bien, se ve perfectamente la estructura y te puedes imaginar bien como fueron aquellas carreras, a los que todas las personas de la sociedad romana acudían. Si has visto la película de Quo Vadis, sabes de lo que hablo.

Bocca de la Verità

Bajando por el Circo Massimo dirección hacia el río, nos encontramos con la famosa Bocca de la Verità. Aunque sí es un monumento que a los turistas les encanta – gracias a la maravillosa escena de Audrey Hepburn y Gregory Peck en Vacaciones en Roma – no es necesariamente un punto clave de nuestra ruta imperial. Pero basta destacar que esa máscara de mármol, que se data alrededor del siglo I, no se sabe qué o quién representa, ni siquiera se sabe cuál era su utilidad, si una fuente o una cloaca. Hay muchas historias y leyendas detrás de esta máscara, pero su origen es reamente un misterio.

Teatro Marcello

Si seguimos subiendo esa calle, la Via Luigi Petroselli, nos encontramos con el Teatro Marcello, un antiguo teatro romano, conectado con el Templo de Apolo. Este teatro fue iniciado por Julio César, aunque muchos emperadores como Augusto, Vespasiano o Alejandro Severo lo fueron restaurando a lo largo del tiempo.

Área Sacra

¡Hablando de Julio César! ¿Sabes dónde fue el lugar de su famoso asesinato? Si callejeamos por detrás del Templo de Apolo, lo que se conoce hoy como el barrio judío, llegamos a la plaza de Largo Torre Argentina. En esta plaza fue donde asesinaron a esta gran figura del Imperio y se encuentran las ruinas del Área Sacra, los restos más antiguos de templos romanos (siglo III a.C.).

Panteón de Agripa

Si seguimos callejeando por el centro de la ciudad nos encontramos con el maravilloso Panteón de Agripa, muy cerca de la Piazza Navona. Es un antiguo templo romano dedicado a los dioses y construido en el 27 a.C. por Marco Vipsanio Aggripa, muy amigo del emperador Augusto. Lo curioso de este templo es su planta circular con una abertura en el centro del techo, que funciona como ventana para que entre la luz. A día de hoy es una iglesia dedicada a Santa María de los Mártires.

Templo de Adriano

A solo dos calles del Panteón nos encontramos con el Templo de Adriano, otro de los monumentos que no puedes dejar pasar por tu ruta imperial. Es muy curiosos ver parte de las columnas del templo, del año 145, como injertado en un edificio del siglo SVII. Dentro del edificio hay un museo dedicado al emperador y una galería de arte.

Castel Sant’Angel

Si continuamos nuestra ruta callejeando hacia el río Tíber, nos encontramos con el Castel Sant’Angel. Este monumento romano se construyó originalmente como un mausoleo para el emperador Adriano en el 135. Con el paso del tiempo fue cambiando el uso del edificio y pasó a ser un edificio militar. A día de hoy es un museo maravilloso y con unas vistas excepcionales de la ciudad, que mantienen muchos elementos y habitaciones de ese uso militar. La tradición cuenta que, cuando la peste golpeó Roma, el Papa Gregorio I, vio al arcángel San Miguel en lo alto del castillo con una espada, simbolizando el fin de la pandemia. Hoy podemos ver en lo alto del Castillo que hay una escultura de bronce, del siglo XVIII, conmemorando esa visión.

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Las Termas de Caracalla y las Termas de Diocleciano

No puede faltar en nuestro viaje en el tiempo, uno de los elementos más importantes de la vida de la Antigua Roma: los baños públicos. En Roma, hay muchas termas que construyeron distintos emperadores, pero las más conocidas, si quieres visitarlas son: Las Termas de Caracalla y las Termas de Diocleciano.

Catacumbas de Roma

No podemos terminar esta guía de qué ver en Roma sin mencionar las famosas Catacumbas de Roma. Estas galerías subterráneas, están estrechamente relacionadas con la historia de la Roma Imperial, ya que cuando el cristianismo empieza a extenderse en Roma, el emperador – considerado una deidad – veía como amenaza que una parte de la sociedad no aceptara como dios al emperador y solo al Dios cristiano, encarnado en la persona de Jesús de Nazaret. Por esta razón, los cristianos fueron perseguidos durante siglos. Estas catacumbas son casi ciudades subterráneas que contienen las tumbas de millones de personas de las primeras comunidades cristianas. Son auténticos laberintos, pero contienen testimonios muy significativos como los primeros símbolos cristianos y los testimonios de los primeros cristianos de la Iglesia que murieron por su fe. En la ciudad de Roma hay muchas catacumbas distintas, las más significativas son las de San Sebastián, San Calixto, Santa Inés, Santa Priscilla y Domitila.

Para finalizar esta ruta Imperial de monumentos esenciales que debes añadir en tu viaje a Roma, mencionamos una curiosidad, no muy conocida entre los turistas: La Pirámide Cestia. Esta pirámide, en el sur de la ciudad, se construyó cerca del 12 a.C. como una tumba inspirada al estilo egipcio.