VIAJAR EN COCHE POR FLORENCIA Y TOSCANA

Aunque la fama de los italianos al volante no sea de las mejores, no hay que tener miedo a viajar en coche por Florencia y Toscana. En general, siendo zonas turísticas, está todo bien indicado. Con alguno de los consejos y advertencias que vamos a dar en este post, ¡disfrutaréis de vuestro viaje en coche evitando contratiempos!

Como ya mencionamos en el post cómo moverse por Florencia, si solo vais a ver Florencia no merece la pena usar el coche. Tampoco si tenéis poco tiempo para ver otros lugares de la Toscana, ya que a los principales núcleos de interés se puede llegar en tren. Pero si tenéis varios días de vacaciones o estáis haciendo un tour por Italia, viajar en coche por Florencia y, especialmente, por la Toscana, merece la pena. Os permitirá mayor libertad de movimientos y, sobre todo, disfrutar al máximo del maravilloso paisaje toscano.

Por suerte, la conducción en Toscana es bastante normal. En mi opinión, lo más complicado es conducir en las ciudades más grandes, como Florencia o Siena. En este post me voy a centrar, principalmente, en los motivos por los que más multas nos ponen: las zonas de tráfico limitado y el aparcamiento. Y haré un repaso con los principales consejos sobre conducción, para mimetizarnos con los italianos y no tener ningún problema.

1. VIAJAR EN COCHE POR FLORENCIA Y TOSCANA: ZONAS DE TRÁFICO LIMITADO

Cartel de zona de tráfico limitado

Tanto en las ciudades, como en la mayoría de los pueblecitos turísticos de la Toscana, hay zonas de tráfico limitado. En italiano se identifican con las siglas Z.T.L. (Zona de Tráfico Limitado). Corresponden a las zonas del centro histórico reservadas a vehículos autorizados, como residentes, autobuses o taxis.

Las zonas Z.T.L. están señalizadas por carteles, pantallas digitales o pequeños semáforos. Os dejo como ejemplo el mapa Z.T.L. de Florencia. Si nos encontramos con estas señales en una calle quiere decir que, a partir de ese punto, la zona está limitada. Normalmente, si tenemos un hotel con garaje en el centro, dentro de la zona Z.T.L., el hotel os solicita la matrícula del coche para autorizar la entrada en la zona reservada.

¿Cómo entender el sistema Z.T.L. y evitar problemas?:

El acceso a la zona Z.T.L. no siempre está prohibido: se puede acceder en ciertos horarios o días de la semana. La señalética nos indica la zona limitada y si el acceso está o no permitido:

• si la pantalla dice «VARCO ATTIVO» quiere decir que no se puede pasar. Si dice «VARCO NO ATTIVO», se puede entrar en la zona Z.T.L. con cualquier vehículo.
• con el semáforo en rojo no se puede acceder a la zona; en verde sí.
• en los carteles normales, cada vez menos frecuentes, está escrito, en italiano y en miniatura, cuándo es posible entrar a la zona limitada. Es complicado de entender hasta para los italianos. Mi consejo es que, si la zona Z.T.L. está regulada por carteles, mejor no entréis en ella. Es donde más nos solemos equivocar.

A veces, bien porque el cartel está un poco tapado, bien porque vamos distraídos, nos saltamos el límite Z.T.L. ¡Si os aventuráis en coche por el centro urbano, id atentos!

Solo se controlan las infracciones en los accesos a la zona. Si hemos realizado un acceso no autorizado, las cámaras registran la matrícula y la multa llega a nuestro domicilio, incluso meses después del viaje a Italia. ¡Tanto si el coche es nuestro como si es de alquiler! Solo hay telecámaras para entrar en la zona Z.T.L. Es decir, si entráis cuando está permitido, luego podéis dejar dentro el coche el tiempo que queráis, y salir cuando os venga bien.

2. VIAJAR EN COCHE POR FLORENCIA Y TOSCANA: APARCAMIENTO

En los lugares más turísticos aparcar se puede convertir en un dolor de cabeza. Mi consejo es que, si vais a estar pocas horas en un sitio, busquéis un parking público. A continuación os explico las diferentes opciones de aparcamiento y a qué tenemos que estar atentos:

• ZONA AZUL: las plazas de aparcamiento en zona azul son de pago. Como en España, hay que buscar el parquímetro, seleccionar el tiempo, recoger el ticket y colocarlo en la ventanilla del coche. Algunos piden la matrícula, que en italiano se dice «targa». Ojo al tiempo máximo de estacionamiento, algunos parquímetros te dejan pagar como máximo 2 horas. En general los domingos y festivos la zona azul no se paga, pero en las zonas más turísticas funciona toda la semana.

Señal de zona con disco horario

• DISCO HORARIO: son zonas de aparcamiento gratuito, plazas marcadas en color blanco, pero con una limitación de tiempo. Las zonas están identificadas con carteles que dicen «DISCO ORARIO» y que señalan el tiempo permitido de estacionamiento (30 minutos, 1 hora, 2 horas).
  Para poder aparcar en esta zona se suele marcar la hora a la que aparcamos en un disco azul. Si el coche es de alquiler es posible que lo tenga. Si no, podéis escribir la hora ala que aparcáis en un folio. Se deja bajo la luna, para que se vea desde fuera.
• Obviamente ojo a no aparcar en zonas de carga y descarga o en plazas reservadas a minusválidos (están señalizadas igual que en España).

Aparcar en Florencia:

• En Florencia hay una particularidad, única en Italia: las plazas marcadas en blanco no son siempre libres, sino de residentes (indicado con carteles). ¡Es otra causa típica para que pongan multas! Estad especialmente atentos porque son zona blanca casi todas las calles que rodean el centro histórico (que es zona Z.T.L.).
• Parkings públicos: os dejo un link con todos parkings públicos de Florencia, con precios y horarios. Cuánto más cerca del centro, más caros. Os aconsejo evitar especialmente el parking de la estación de Santa Maria Novella, ¡ha sido clasificado como uno de los más caros de Italia! Yo lo suelo dejar en el parking de Sant’Ambrogio (Piazza Annigoni, 9).
• Otra opción interesante en Florencia es dejar el coche en aparcamientos en las afueras, cerca de la autopista. El más grande y cómodo es el «parcheggio Villa Costanza», al que solo se accede desde la autopista A1 (máximo 7€ al día). Allí mismo se coge el tranvía (línea T1), que en 20 minutos llega a la estación de Santa Maria Novella. A lo largo de esta línea de tranvía hay otros aparcamientos gratuitos: aparcamiento en via Filippo Sassetti, con parada «De André», o el aparcamiento del Centro Comercial Coop de Ponte a Greve, con parada Nenni-Torregalli.

Si os interesa saber qué ver en vuestra visita a Florencia, podéis consultar los post qué ver en Florencia, ver Florencia en un día: ruta imprescindible o ver Florencia en dos días: día 1. Para información sobre la Toscana podéis leer el post 8 razones para viajar por la Toscana.

Aparcar en Siena:

En esta ciudad hay varios parkings públicos. Yo suelo utilizar el parking Santa Caterina, ya que al lado se cogen unas escaleras mecánicas que van al centro. Hay que evitar entrar con el coche en Siena los días del Palio, la gran fiesta medieval de la ciudad.

Para visitar la ciudad podeís consultar el post Qué ver en Siena: la joya de la Toscana.

Aparcar en Arezzo:

Arezzo es una ciudad más pequeña pero igualmente el centro está limitado. Yo voy con mucha frecuencia y casi siempre aparco en el Parcheggio Pietri (via Giuseppe Pietri): la parte que está al lado de las escaleras mecánicas es zona azul pero, a su derecha, hay otra zona gratuita.

Aparcar en los pueblos medievales de la Toscana:

La mayoría de los pueblos más turísticos están bien organizados y tienen aparcamientos de pago bien señalizados. Lo mejor es seguir las indicaciones. En los pueblos más pequeños o menos turísticos se suele encontrar aparcamiento libre o en zona azul.

3. VIAJAR EN COCHE POR FLORENCIA Y TOSCANA: NORMAS DE CIRCULACIÓN

Mis dos consejos más importantes, tras casi cuatro años conduciendo por la Toscana, son: alerta permanente y no ponerse nervioso. Alerta permanente no de estar en tensión constante, pero de no distraernos mientras conducimos, porque no sabemos cuándo un italiano nos va a sorprender con una maniobra «original». Y no ponerse nervioso al volante, ya que nos puede hacer cometer alguna tontería. Aunque piten, no hay que perder la calma. Generalmente los italianos tienen muy poca paciencia conduciendo, así que en cuanto uno duda un poco tocan el claxon.

En las ciudades, especialmente en Florencia, ¡atención a las motos y las bicis! A veces no estamos acostumbrados a conducir teniendo en mente que nos pueden atravesar bicicletas o adelantar motos.

Los italianos no son muy proclives a usar los intermitentes. Tampoco hacen mucho caso al «Stop» o «Ceda el Paso». Así que atención en los cruces, incorporaciones y rotondas. El mito de que los colores del semáforo son relativos para los italianos no suele ser cierto, al menos según mi experiencia. Respetan el rojo y el verde (aunque en ámbar aceleran en vez de frenar…).

4. VIAJAR EN COCHE POR FLORENCIA Y TOSCANA: INFORMACIÓN ÚTIL

Con frecuencia los Carabinieri realizan controles de documentación a los coches. Se suelen poner en calles de acceso/salida de los centros urbanos y te dan el alto. Piden la documentación personal (DNI o pasaporte) del conductor (a veces también de otros miembros del coche) y los papeles del coche. Controlan el seguro y que ha pasado la revisión, generalmente tardan unos 5-10 minutos. ¡Así que no os asustéis si os paran, no es porque hayáis hecho nada malo (en teoría)!

En Italia hay muchas autopistas de pago, a las que se entra por peajes. La velocidad máxima en las mismas es de 130 km/h. A veces hay carteles que indican el control de la velocidad por «tutor»: calculan la velocidad media entre dos puntos determinados. Otros límites son: 110 km/h para autovías (carteles en azul), 90 km/h para las carreteras extraurbanas y 50 km/h en los centros habitados.

Espero que la información recogida en este post os sea de ayuda en vuestra aventura italiana sobre cuatro ruedas. ¡Buen viaje!