Visitar Córdoba

Visitar Córdoba es toda una experiencia, pero para disfrutar de la magnífica experiencia de crecimiento personal que supone visitar córdoba

Aprovecha mucho más si tienes en cuenta estos pequeños que te propongo hoy:

• Haz que Visitar Córdoba sea un auténtico viaje de enriquecimiento personal en el que disfrutarás de la magia, la gastronomía y el carácter tan íntimo, personal y extravagante del pueblo de Córdoba.

• Los cordobeses nos sentimos muy orgullosos de nuestra Mezquita-Catedral. Pero a la vez es un motivo de división social la discusión de si el monumento es cristiano o musulmán. Mejor no entrar en este tema si no comprendes todas las implicaciones que tiene.

• Disfruta de todo lo que las calles, los bares, los restaurante, el clima y la gente de Córdoba tiene para ofrecerte

• Piérdete por las calles y callejuelas de Córdoba, recuerda que los cordobeses somos buenos anfitriones por tradición, está en nuestra cultura el ayudar al visitante. Así que no dudes en perderte por nuestras calles y preguntar el camino a cualquier paisano que encuentres. Te sorprenderás al comprobar que el buen cordobés puede incluso variar su paseo o el camino que está siguiendo para acompañarte al lugar al que deseas llegar. Además de obsequiará con multitud de consejos, chascarrillos y recomendaciones sobre bares y restaurantes que visitar en la zona.

• No dejes de probar sus platos más típicos: Salmorejos, Flamenquín, san Jacobo, Berenjenas a la miel, Rabo de Toro… Son algunas de las delicias que encontrarás en cualquier restaurante de la ciudad.

¿Sabes que las flores que se pueden ver en los patios de Córdoba duran apenas tres días pero requieren de meses de cuidados para florecer? Recuérdalo al visitar Córdoba

• Recuerda que los patios de Córdoba son propiedad privada y las plantas que en ellas encontramos han sido mimadas y cuidadas durante todo el año, a veces, algunas de las plantas que vemos pueden tener cientos de años. Así que es muy importante tener el respeto y cuidado oportuno en cada uno de los patios que visitamos.

• Sin olvidar que cuando entras en la casa de una persona y visitas su patio, eres un invitado a la casa de la persona que lo cuida. Así que siéntete cómo un invitado y actúa con la educación que tu anfitrión merece. Si te gusta algo díselo, si tienes alguna pregunta sobre el cuidado de las plantas en los patios o sobre cualquier aspecto de la vida en Córdoba, pregunta, habla con el dueño del patio de Córdoba, pues a fin de cuentas es tu anfitrión y tu eres un invitado a su hogar.

• No seas cotilla. De nuevo debes recordar que entras en una casa particular. Si que es verdad que los cordobeses somos personas amables y buenos anfitriones por cultura, pero recuerda que también hemos heredado la cultura islámica, en la que son muy celosos de su intimidad. Si hay una puerta o ventana entreabierta o simplemente cerrada, respeta la intimidad de la casa y no te asomes, al menos si no tienes el permiso de tu anfitrión. Esto puede percibirse como una tremenda falta de educación, una ofensa hacia la familia e incluso puede ser motivo para que el dueño de la casa te invite a marcharte. En más de una ocasión el asomarse a una puerta o ventana entreabierta ha sido motivo de expulsión de un patio cordobés y ha ocasionado las quejas del visitante que no se ha informado debidamente del carácter y la cultura de la ciudad que visita.

• Usa mascarilla y toma las medidas de seguridad e higiene necesarias y recomendadas. En Córdoba valoramos de un modo muy especial la contención de enfermedades dentro de nuestra ciudad. No es sólo un tema de salud, es mucho más que eso. La historia de Córdoba se entrelaza con la historia de cómo el Arcángel San Rafael, la medicina de Dios custodia especialmente al pueblo cordobés frente a todo mal que pueda provenir. Por eso los cordobeses nos sentimos especialmente protegidos y consideramos la seguridad y salud de nuestro pueblo como algo religioso. No tomar las medidas necesarias puede ser considerado como una ofensa hacia todos los cordobeses y corres el riesgo de ser reprendido y avergonzado en medio de la calle por no usar la protección adecuada.

• No nos compares con otras ciudades. Los cordobeses nos sentimos orgullosos de ser la ciudad fundada por Claudio Marcelo y capital oriental del Imperio Romano, no compares nuestros restos romanos con los de cualquier otro punto de España pueden parecer los mismos, pero herirás el orgullo de la persona con la que hablas. Nos sentimos orgullosos de haber sido la ciudad más grande y rica del imperio Omeya (Madinat Al-Zahra estaba construida en mármol y oro) , de haber albergado entre nuestros muros a algunos de los mejores médicos y filósofos (Ibn-Firnás fue la primera persona en volar del mundo y Séneca es considerado el padre de la lucha por la igualdad de género). Comparar nuestros monumentos o nuestra historia con la de cualquier otro punto del mundo es menospreciar nuestra cultura.

¿Conoces el refrán “cordobés y hombre de bien no puede ser”?

• No confundas el carácter cordobés, aunque por nuestra cultura somos personas con un carácter amable y acogedor. También en nuestra historia contamos con episodios de rebeldía que han quedado tan arraigados que a día de hoy podemos escuchar frases cómo “cordobés y hombre de bien no puede ser”, inspirados por la lucha en la que los cordobeses expulsaron a todos los nobles a favor del derecho de pernada de su ciudad (y a los que no quisieron irse los ajusticiaron) por ejemplo. Así que es muy de tener en cuenta que el carácter cordobés puede ser muy inflamable.

• Pide un medio de vino, en lugar de una copa. Si en Córdoba pides una copa de vino se servirá la copa tradicional, en cambio la medida estándar para el vino cordobés es el “medio”. Un medio de vino no hace referencia a la mitad de una copa, hace referencia a medio cuarto de litro, o lo que es lo mismo, una copa de cata llena hasta el borde. Por supuesto, si pides un medio de vino, el tabernero te servirá un vino blanco de la denominación Montilla-Moriles.

Si un Cordobés te dice “Luego nos vemos”. Es porque realmente no quiere quedar contigo.

• No nos esperes. Si un cordobés te dice “nos vemos luego” o incluso teniendo tu número de teléfono te dice “luego te llamo”, no lo va a hacer. Es un convencionalismo social el decir frases como esas cuando no quiere volver a quedar contigo. Las tomará con el mismo significado si eres tú quien las dice y entenderá que quieres mantener relaciones cordiales con él pero nada más. En cambio si de verdad está interesado en quedar contigo para Visitar Córdoba te propondrá un día y una hora (puede ser inmediata o dentro de un año) aunque este día y hora se modifique más tarde.

• No tomes muy en serio los chistes sobre sevillanos y no los hagas si no entiendes lo que Sevilla significa para Córdoba. Es muy común que un cordobés insulte al pueblo sevillano o a la gente de Sevilla, Pero Sevilla es considerada y querida como una hermana de Córdoba. Es muy normal que un cordobés tenga familia y amigos íntimos en Sevilla. Así que como en una buena relación de hermanos, uno puede insultar al otro, pero existe entre los dos una relación de afecto y cariño especial. Y por supuesto ningún cordobés va a permitir que nadie insulte a su ciudad hermana sin sentirse ofendido él mismo.

• ¡Cuidado con las mujeres de Córdoba!. La mujer cordobesa es sin duda una de las más hermosas del mundo, en sus rasgos se distingue la ascendencia árabe mezclada con la europea lo que le concede una exuberancia y un atractivo de embrujo. Pero la belleza de la mujer cordobesa no reside sólo en su físico, lo que verdaderamente hace especial a una mujer cordobesa es su carácter de mujer empoderada. La mujer de Córdoba es fuerte y lo sabe. Por lo tanto conviene tratarla cómo lo que realmente es, una fuerza de la naturaleza que es consciente en todo momento de su poder.

• ¡No imites nuestro acento! Esto no es sólo algo de Córdoba, es en general de toda Andalucía. El andaluz es un dialecto del Español y tiene sus normas y acentos dependiendo de la región. Para un andaluz es fácil distinguir de donde provienes con sólo escuchar el habla de un paisano. Intentarlo sin conocer estas sutilezas te puede dejar en evidencia.

• Comprende el humor cordobés. El humor Cordobés y el andaluz en general, es un humor muy ácido y con una carga tremenda de sarcasmo que se basa sobre todo en el doble sentido y la irracionalidad que este puede causar. Un andaluz toma toda su vida con humor, se ríe de todo y de todos (incluso de sí mismo). Puedes reírte mucho si comprendes este sentido del humor, o puedes ser objeto de burla si no lo comprendes. Aunque hay que admitir que los reyes de esto son los gaditanos.

• Si quieres que un cordobés cante junto a tí comienza con la frase “soy cordobés, de la tierra del Guadalquivir”. Ningún cordobés se resistirá a seguir esta canción.

• Infórmate sobre la cultura, las costumbres, los monumentos, los gustos… Este consejos es para toda la ciudad que visites. Empápate de la cultura de una ciudad y después disfrútala.

• No comentes nada sobre el Córdoba F.C, es una espinita que tenemos todos los cordobeses. Hasta a los que no nos gusta el fútbol.

¡No olvides seguir aprendiendo cosas para Visitar Córdoba en nuestro siguiente post en Que ver y hacer y siguiendo a Tips to travel to Córdoba